Los galpones del viejo ferrocarril era el escenario neutral donde estaban todos, los seis miembros de la banda. Un sueño que había comenzado hace algún tiempo atrás y ahora se hacía realidad. Pero aún así, quedaba esta charla pendiente. ¿Se pierden los sueños cuando se los quiere hacer realidad? Si no son sueños, ¿qué son?
Al llegar, el ambiente era de risas y comentarios divertidos pero sabía que no se mantendría así por mucho tiempo.
El primero en hablar fue Pierre. Quiso decir algo sobre que últimamente ya no eran los mismos, que su música ya no parecía sacada del alma. Seb fue quien tomó la palabra, iniciando así un debate entre todos. Viejas cuentas eran pasadas: ¿Qué había pasado con la plata del último recital? ¿Y con lo del contrato?
Pero como David no era fanático de las peleas (y se estaba generando una) buscó una solución conveniente para todos:
-¿Por qué no contratamos a alguien que investigue?
Todos rieron al primer momento, pero inmediatamente después se dieron cuenta de que era una buena idea.
-¿Un investigador? -repitió Seb, aún sin entender demasiado - ¿Y de dónde piensan que vamos a sacar la plata para pagarle si eso es justamente lo que nos falta?
Y ahí estaba yo, con mi cara de Ted. Se suponía que tenía que decir algo y lo dije...
-Le damos parte de la plata que encuentre.
De inmediato todos me miraron, fusilándome con sus ojos, pero ¡algo había que hacer!
-¿Entonces, de dónde sacamos un investigador en este pueblo de porquería? -exclamó Jeff.
Chuck se acordó del viejo Bordelius. Un policía jubilado hacia años que tenía fama de buen investigador. Así que a él recurrieron.
Mica Grinóvero and Kevin Jones
No hay comentarios:
Publicar un comentario